La precariedad laboral se extiende ya entre el empleo indefinido, donde 4 de cada 10 nuevas contrataciones son parciales

La Rioja continúa siendo un claro ejemplo cuantificable de precariedad laboral. La reducción del desempleo se está produciendo a costa de empleos indecentes por días e incluso por horas. En este sentido, hasta el mes de septiembre, nuestra Comunidad ha registrado 110.838 contratos, pero de ellos sólo el 6,7% fueron indefinidos. De hecho, la mitad de los contratos realizados no ha superado el mes de duración.

Y es que 8 de cada 10 contratos que se realizan en La Rioja corresponden a las modalidades de ‘Obra o servicio’ y ‘Eventual por circunstancias de la producción’. A este último tipo corresponden mayoritariamente los efectuados a través de Empresas de Trabajo Temporal, en las antípodas del empleo estable y de calidad deseable. De hecho, de los 52.974 contratos Eventuales por circunstancias de la producción hasta agosto, el 76,3% contó con una duración menor de un mes según la estadística del Servicio de Empleo Estatal. Es más, aunque la estadística no profundiza hasta ese punto, estamos en condiciones de asegurar que más de la mitad de estas contrataciones no superaron ni siquiera la semana de duración.

No obstante, la precariedad laboral no puede identificarse únicamente con la duración del contrato en el tiempo, sino también por el tipo de jornada efectuada. Y en este punto, cabe destacar el preocupante ascenso de las jornadas por horas en los contratos indefinidos. De hecho, hasta el mes de septiembre, el 40% de los contratos indefinidos realizados en La Rioja se han efectuado para cubrir una jornada parcial, por horas.

La reducción de jornada conlleva, inevitablemente, a la menor remuneración salarial, hasta el punto que se está generalizando la figura de ‘trabajador pobre’ que, aunque cuenta con un empleo estable no llega a fin de mes; una situación muy preocupante que incide en el aumento de la exclusión, el riesgo de pobreza y las desigualdades. Unas desigualdades que también saben de sexo, puesto que las mujeres vuelven a copar la gran mayoría de las jornadas parciales (un 65%) en La Rioja, y por lo tanto las menores remuneraciones, con evidentes consecuencias en su jubilación y paro.

Por todo ello, UGT de La Rioja quiere denunciar la situación real del mercado laboral riojano, marcada por la rotación y el abuso de la contratación temporal. Una precariedad que se extiende de forma alarmante entre todas las tipologías de contrato, incluidos los indefinidos, provocando la generación de trabajadores pobres. Además, cabe destacar que, debido a la escasa formación sobre el puesto de trabajo, esta precariedad implica una falta clara de garantías de salud y seguridad laboral.

En este sentido, UGT de La Rioja insta a las empresas a dejar de abusar de la contratación temporal y a demostrar, si es así, que la recuperación comienza a notarse generando puestos de trabajo decente.

Igualmente, exige aminorar esta precariedad laboral garantizando por ley que las empresas que subcontratan sean responsables subsidiarios de los salarios y la protección social de los trabajadores y trabajadoras de las empresas subcontratadas se encuentren estas donde se encuentren.

Por otro lado, solicita establecer por ley como requisito en la contratación pública la exigencia por parte de los organismos contratantes el respeto a los convenios colectivos aplicables y condiciones de trabajo decente, una exigencia que extendemos a las franquicias y filiales de las grandes empresas, tanto en nuestro país como en el extranjero.

Al mismo tiempo, exige la derogación de las últimas reformas laborales y el establecimiento de incrementos salariales que contribuyan al crecimiento económico y del empleo y profundizar, en la negociación colectiva, en el desarrollo de cláusulas que ayuden a impulsar el empleo y, sobre todo, a mejorar su calidad.

Además, es fundamental dignificar el SMI incrementándolo hasta los 800 euros en el primer año y subidas progresivas durante la legislatura, hasta alcanzar el 60% del salario medio de nuestro país.

Y por último, insta al Gobierno a que dé cumplimiento, modificando el Estatuto de los Trabajadores, a la Directiva 1999/70/CE al objeto de garantizar el cumplimiento de las sentencias dictadas por el Tribunal Superior de Justicia de la UE el pasado día 14 de septiembre y que señalan la discriminación y el abuso en la contratación temporal en nuestro país.