El sector de Enseñanza de la Federación de Empleadas y Empleados de los Servicios Públicos de UGT de La Rioja (FeSP-UGT La Rioja) señala que durante el mes de julio los equipos directivos han trabajado denodadamente para presentar sus planes de contingencia. En esta primera semana de septiembre, todo el profesorado se ha volcado en organizar y preparar  los centros, señalizando los espacios, colocando el mobiliario e intentando que a día de hoy los centros estén en las mejores condiciones para recibir al alumnado.

UGT entiende la impotencia, la indefensión e incluso el miedo de la Comunidad Educativa a afrontar un curso con una mochila llena de incertidumbres, porque aunque el Plan de Contingencia es exhaustivo y minucioso, habrá situaciones imprevisibles que deberán afrontar.

El sector de Enseñanza de este sindicato insiste en reconocer el trabajo y esfuerzo de todo el profesorado, y manifiesta su firme compromiso en estar atentos y velar por el cumplimiento de:

• La concreción del destino de los 13,2 millones asignados a La Rioja.
• Los 220 profesores que tienen que estar en los centros educativos.
• Los equipos de protección indispensables para su seguridad: mascarillas y geles hidroalcohólicos.
• Protección para los docentes de mayor riesgo por razones de salud o de edad arbitrando un sistema de teletrabajo cuyas condiciones sean negociadas.
• Material tecnológico disponible también para el profesorado.
• Personal sanitario para desempeñar las funciones de coordinador COVID, aunque sea compartido.
• Ratios más bajas buscando acuerdos con otras administraciones, si fuera necesario.
• Agilidad en las sustituciones.
• Monitores en los comedores. 

El sector de Enseñanza de UGT es consciente de que el riesgo cero no existe, pero estará vigilante para que las medidas de seguridad se cumplan y se vayan haciendo las adaptaciones necesarias para mejorarlas, como también lo harán las administraciones, tanto la educativa como la sanitaria.

Por otro lado, FeSP-UGT La Rioja entiende que los temas de conciliación familiar no pueden  ser abordados y recaer en el ámbito educativo. Son aspectos de gran complejidad social e insta al Gobierno a que los resuelva de manera global, porque su solución dará más seguridad sanitaria a los centros.

UGT sigue apostando por la presencialidad, que es lo que da al proceso educativo los valores añadidos de socialización que son fundamentales para el desarrollo del alumnado. La escuela es el lugar donde se compensan desigualdades, pero esta asistencia presencial debe estar garantizada por la seguridad del alumnado y del profesorado.