1. Situación actual

El escenario internacional sigue siendo protagonizado por la guerra de Ucrania, que parece enquistada a pesar de los últimos avances de las tropas ucranianas. Las previsiones de una guerra larga y cruenta se hacen reales y a las penalidades de la guerra, se añaden las adversidades climatológicas, en un país que tiene gran parte de sus infraestructuras energéticas y de suministros destrozadas. Por su parte, las elecciones en Chile, Colombia y Brasil han dado un respiro a la democracia y a las fuerzas del progreso. Si bien es inquietante el modelo de conducta trumpista de los seguidores de Bolsonaro no dispuestos a aceptar los resultados electorales y llamando al golpe militar.

Es evidente que en los últimos años está disminuyendo el número de países que pueden ser considerados como democracias y ha aumentado el número de autocracias en el planeta, de gran significación, son, por el contrario, los movimientos de respuesta de los que se tienen noticia en China, y en Irán, y cuya repercusión en el régimen de este país es difícil de evaluar.

La Europa democrática se enfrenta al reto de hacer frente a una ultraderecha que oscila entre un perfil estridente (Urban en Hungría) y el perfil falsamente moderado en Italia (Meloni), donde ya se están presentando medidas de claro corte antisocial. En España, ya estamos constatando los efectos de las políticas de ultraderecha en Castilla y León, con ataques constantes al estado social y de derecho, a la convivencia y a la diversidad, combatiendo con especial saña el Diálogo Social. Frente a ello, solo criterios de transparencia, progreso y corte social podrán impedir el avance de un movimiento que amenaza con deshacer años de progreso e impedir la creación de un Europa democrática y social.

En cuanto a la inflación, España con un 7,3% en octubre, junto a Francia (7,1%), se sitúa entre los países por debajo de dos dígitos, superando a Estados Unidos cuya economía ha moderado los precios en los últimos meses, aunque aún muestra un 7.7% de incremento del IPC. La moderación española, dentro del ámbito europeo, viene motivada por el comportamiento del precio de los productos energéticos, la llamada excepción ibérica, que, aunque siguen registrando valores muy elevados, demuestran el éxito de las medidas tomadas, algunas con gran valor económico, de ayuda a las personas consumidoras en distintos ámbitos, que deben ser puestas en valor (tope del gas, ayudas al transporte, extensión de bonos sociales y ayudas, rebajas de impuestos al consumo, etc).

 

II.        Ante la crisis actual, más protección social y más intervención pública

Estos últimos años, se ha demostrado que las sucesivas crisis a las que nuestro país, Europa y el mundo están haciendo frente, solo pueden superarse con medidas sociales. La reducción de los efectos de la inflación, protegiendo a las más amplias capas de la población, manteniendo un sostenido incremento de la presión impositiva sobre las empresas y personas con mayor capacidad    y que incluso están siendo beneficiadas por la actual situación –energéticas, bancos, grandes fortunas, etc.- son líneas políticas imprescindibles.

La resistencia a una mayor presión fiscal nos sitúa ante la realidad de unas empresas que no han dejado de incrementar sus beneficios y pretenden no compartir con la sociedad sus resultados. De igual manera, la intervención pública es cada vez más necesaria en sectores estratégicos y en el impulso de medidas sociales, en un entorno de ralentización del crecimiento económico y de revisión casi continua de las previsiones económicas.

Los datos del paro en La Rioja demuestran que las reformas normativas adecuadas sí tienen efectos,  y asistimos en 2022 a la positiva combinación de reducción del paro y a un impulso de la contratación indefinida en esta comunidad autónoma, siendo de este tipo 1 de cada 3 contratos que se firman.

Los Presupuestos Generales del Estado para el 2023, desde la perspectiva de UGT, responden a la necesidad de consolidar y ampliar el paraguas social y derechos de los ciudadanos de nuestro país con medidas de tanto calado como el mantenimiento del poder adquisitivo de los pensionistas, el aumento de las percepciones de desempleo y la previsión del continuo despliegue de Fondos Europeos. En lo que corresponde a La Rioja, insistimos en la colaboración público-privada para elaborar proyectos atractivos e innovadores que sean susceptibles de recibir ese tipo de fondos, generadores de riqueza en la región.

 

II.        El papel de la negociación colectiva. Salario o Conflicto

La posición de la patronal de bloqueo de la negociación colectiva ha determinado un giro importante en nuestra posición sindical ante un escenario obstruccionista que dificulta enormemente la negociación. Sorprende más aun esta posición cuando los márgenes de beneficios en España (42,3%) fueron 2,4 puntos porcentuales superiores a la media de la Eurozona (39,9%). A título de ejemplo, durante los 9 primeros meses del año, el beneficio acumulado por las seis grandes energéticas registró un crecimiento del 31% respecto al mismo periodo de 2021, doce veces más que la variación salarial media pactada hasta octubre. De esta forma, la campaña “Salario o Conflicto” viene exigida por la necesidad de hacer frente a la reaccionaria posición de la patronal.

Y es que, en España, los salarios han subido de media en 2022 un 2,6%, frente a unos precios que se incrementan el 9% en términos armonizados con Europa. Somos el cuarto país que menos sube los salarios entre los 27 y estamos incluso por debajo de la media europea (un 4,1%). Por eso, la presión sindical se torna en absolutamente imprescindible. En aquellos sectores donde el sindicato  es más fuerte y se han producido movilizaciones, se están consiguiendo subidas salariales que protegen los salarios y el nivel de vida de las personas trabajadoras. En cambio, en aquellos ámbitos donde la presencia sindical es más tenue o inexistente se está empobreciendo a la clase trabajadora. Ahí radica la importancia de la negociación del AENC que pueda dar estabilidad y seguridad a las empresas y a los trabajadores y trabajadoras.

En cuanto a la marcha de la negociación colectiva, se aprecia un repunte del número de convenios colectivos firmados en relación a los años de pandemia. Se han firmado a octubre del 2022, 2.801 convenios colectivos que afectan a más de ocho millones de personas trabajadoras y casi ochocientas mil empresas. La subida salarial, aun en crecimiento aun es exigua, el 2,64% de media, 1,1% más que el año 2021 pero insuficiente para hacer frente a una inflación del 7.3%. Se observa un positivo incremento del colectivo de trabajadores y trabajadoras protegidos por la cláusula de garantía salarial, el 23,75%, frente al 16,1% del año anterior.

 

III.       Insistir en lo importante

El SMI en España, gracias al Diálogo Social, ha superado los mil euros mensuales, sin embargo, todavía está muy por debajo del nivel de otros países, mientras el poder de compra de las clases trabajadoras está amenazado por las previsiones de inflación. Por esa razón, urge recuperar el valor real del salario mínimo en 2023 como instrumento básico de la capacidad adquisitiva de las personas trabajadoras.

En aras a una mejora de los derechos de las personas trabajadoras, propugnamos:

 

•          En el ámbito de las relaciones laborales, exigimos a la Patronal el desbloqueo de la Negociación Colectiva para que las personas trabajadoras puedan actualizar sus convenios y dejar de perder poder adquisitivo. En este sentido, UGT-FICA ha secundado las movilizaciones en el sector del Calzado y les apoya en su pelea por conseguir salarios justos.

 

•          Apoyo y solidaridad con los trabajadores y las trabajadoras del sector del calzado y con las movilizaciones llevadas a cabo por un convenio justo.

 

•          Exigir un acuerdo en el convenio colectivo agropecuario de La Rioja que garantice salarios dignos y recupere el poder adquisitivo perdido por los trabajadores y las trabajadoras del sector.

 

•          Llevar a cabo movilizaciones para exigir tanto a las mutuas e inspección médica a tener un trato respetuoso hacia las personas trabajadoras, como para exigir a la Dirección Provincial de Inspección de Trabajo y Seguridad Social en La Rioja una mayor agilidad en la resolución de las denuncias interpuestas.

 

•          En cuanto a la jornada laboral, UGT La Rioja defiende la jornada laboral de 32 horas semanales para todos los trabajadores y las trabajadoras, independientemente de si son empleados públicos o trabajan en la empresa privada.

 

•          Asimismo, en cuanto a los convenios colectivos, UGT La Rioja reclama la actualización de los convenios caducados y la actualización de los que expirarán para el año que viene, entre los que se encuentran los convenios sectoriales de limpieza de edificios y locales u hoteles y alojamientos turísticos.

 

•          Legislar con perspectiva de género, y sensibilizar al conjunto de la población contra las violencias machistas, impulsando, en el marco de la negociación colectiva, protocolos contra el acoso sexual y el acoso por razón de género en el trabajo.

 

•          Hacer frente al cambio climático con medidas efectivas y urgentes que aseguren una transición justa para personas y territorios, con un sesgo necesariamente social.

 

•          Hacer frente a los niveles de siniestralidad y a las nuevas dolencias profesionales con cambios legislativos profundos y la duplicación de los medios de todo tipo de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

 

•          El modelo de pensiones español debe seguir las líneas ya consensuadas anteriormente basadas en sistema sostenible, sin que se afecten los derechos de los pensionistas presentes y futuros. En el que no se incrementen los límites de edad puesto que ya fueron modificados en su momento y acojan medidas imprescindibles desde el punto de vista financiero y de la solidaridad como el destope gradual de las bases de cotización.

 

IV.       Compromiso para conseguir un sindicato más fuerte

El sindicato ha realizado un esfuerzo muy importante para reforzar su presencia, incrementando su número de representantes en las empresas y subiendo sus niveles de afiliación. La nueva campaña de promoción es un ejemplo claro de ello. Es imprescindible que todos los cuadros de la organización asuman de forma directa y personal este reto en el cual se encuentra la clave de nuestro futuro.