Tras una dura lucha de más de 3 años, el Tribunal Supremo ha fallado en casación a favor de la demanda interpuesta por la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FeSMC) de UGT y CCOO-Servicios, sobre el conflicto colectivo en la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional.

Esta demanda pretendía la equiparación salarial del personal que ejerce como monitores de los comedores escolares, dadas las desigualdades de sueldo entre las monitoras con más antigüedad, que pasaron subrogadas al Convenio colectivo estatal del sector laboral de restauración colectiva, y las nuevas, suponiendo una fuerte diferencia económica mensual.  

En el correspondiente escrito, tras exponer los hechos y fundamentos de derecho, los sindicatos pedían que se dictara sentencia por la que se declarara que “las/os monitoras/es que presten servicios en empresas que vinieran aplicando los convenios colectivos de hostelería a puestos u ocupaciones de monitoras/es en los territorios que lo venían haciendo, deberán aplicarse las condiciones contenidas en los mismos, tanto al personal vinculado a la entrada en vigor del presente convenio colectivo estatal, como al personal que resulte contratado tras la firma del presente convenio para dichos puestos u ocupaciones; y en consecuencia, a percibir el salario que establecen los mismos.

Con fecha de 10 de noviembre de 2017, la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional falló sentencia estimando la demanda de UGT y CCOO, a favor de ambos sindicatos.

La patronal recurrió en casación y el recurso fue impugnado conjuntamente por FeSMC-UGT y CCOO-Servicios.

Así, el 25 de octubre del 2019 hemos recibido la notificación de que el Tribunal Supremo desestima el recurso de casación interpuesto por la Federación Española de Asociaciones Dedicadas a la Restauración Social (FEADRS), contra la mencionada sentencia dictada el 10 de noviembre de 2017.

De este modo, UGT celebra esta buena noticia para el sector, dando un paso adelante en la defensa de los derechos de los y las trabajadores del mismo.