El desempleo repunta levemente en agosto mientras la afiliación a la Seguridad Social cae en 957 personas
UGT considera que, tras afianzarse el crecimiento económico y la creación de empleo, toca subir los salarios y reducir la jornada
Fecha: 02 Sep 2025

La Rioja ha registrado en agosto una subida de 34 nuevas personas desempleadas que elevan la cifra total del paro en la comunidad a 12.171 personas tras dos meses de subida consecutiva. Un incremento leve que ha tenido su mayor expresión en Servicios, con 66 desempleados más, y en Industria, que suma 60 nuevas personas paradas. Por el contrario, la contratación estival ha favorecido la entrada al mercado laboral de personas sin empleo anterior, que se reducen en medio centenar este mes. Por sexos, el paro ha aumentado entre las mujeres (28 más) frente a los hombres (6 nuevos parados).
Este leve incremento en las listas del desempleo no se refleja en igual cantidad en las cifras que maneja la Seguridad Social, que este mes registran una caída de afiliación de 957 personas. Esta bajada, habitual cada año en el mes de agosto, está vinculada a periodos vacacionales extensos o con finalizaciones de contratos eventuales con expectativas de continuidad en próximos meses. En este sentido, Educación y la Industria Manufacturera acaparan más del 85% de esta bajada afiliativa. Aun así, con 110.399 personas afiliadas este mes y tras tres meses consecutivos de caída, La Rioja contabiliza 3.440 personas afiliadas más que hace un año.
En materia de contratación, el periodo estival, poco propicio a la contratación indefinida (el 56% de las contrataciones se han producido en el sector servicios), ha reflejado una ligera caída de la contratación estable hasta el 27,28%.
En cualquier caso, agosto mantiene el comportamiento habitual de cada año, con un ligero repunte del paro, más acusado en las cifras de afiliación, que no supone un cambio en el buen comportamiento de la economía riojana y la creación de empleo. Por ello, UGT considera que es momento de abordar con firmeza el cambio de condiciones laborales para los trabajadores con un incremento sustancial de los salarios que permitan elevar el poder adquisitivo; y, a su vez, una reducción de jornada laboral que favorezca mayor tiempo de conciliación, el mejor reparto de las oportunidades de empleo, el ocio y el consumo que, a su vez, permiten mejorar la demanda y la actividad.