Los trabajadores de Metal celebraron una asamblea en el Ayuntamiento con posterior manifestación hasta la Plaza del Mercado, donde se ubicó la concentración de trabajadores de Comercio 

La aplicación de la reforma laboral está haciendo estragos en La Rioja. Después de la destrucción de empleo, ahora toca la destrucción de cualquier derecho laboral y económico adquirido a través de los convenios. Por el momento, dos convenios colectivos de ámbito regional han decaído en La Rioja después de que se cumpliera la prórroga máxima de un año impuesta por la reforma laboral para aquellos convenios caducados y no renovados.

Esta drástica imposición que introdujo la reforma laboral aprobada por el Gobierno Rajoy ha dejado en una situación muy complicada a los más de 1.700 trabajadores regulados por los convenios de Comercio general y Comercio Textil; convenios que han desaparecido y con ellos los derechos fijados.

A partir de ahora, estos trabajadores pasarán a regularse única y exclusivamente por el estrecho margen que deja el Estatuto de los Trabajadores, ya que no existen convenios estatales que los sustenten tras la caída de los regionales. Un suelo legal básico que dista mucho de las mejoras laborales y sociales que contemplan la mayoría de los convenios colectivos. Por lo tanto, será el empresario quien decida en cada caso respetar las condiciones actuales (fijadas en 2008 y 2009) o rebajar salarios y aumentar jornada, como permite el Estatuto de los Trabajadores. Concretamente, podría reducir un 40% el salario y aumentar hasta cinco días la jornada anual, así como eliminar cualquier mejora social (permisos...) o económica (complementos) que tuvieran.

Por su parte, tras casi un año de negociaciones, los trabajadores del Metal están en una situación muy complicada ya que el acuerdo queda lejos. Mientras por responsabilidad las organizaciones sindicales han llegado a plantear incluso la congelación salarial, la patronal pretende congelar también la antigüedad  (amenazando con no firmar el convenio si no se accede a ello) y contar con la máxima flexibilidad horaria de sus trabajadores sin acuerdo, así como poder descolgarse del conio.

El secretario regional de MCA-UGT, Jesús Izquierdo, ha advertido de que "no vamos a tolerar presiones y la utiklización de los elementos más nocivos de la reforma laboral por parte de la patronal".

De hecho, UGT de La Rioja tiene constancia de que, en varias empresas instaladas en La Rioja con un número de trabajadores importante, la propia dirección se está desmarcando y alcanzando acuerdos de prórroga con las organizaciones sindicales hasta finales de año, cubriendo así la labor que la patronal del sector no ha sabido desarrollar.

Por ello, UGT de La Rioja insta a la patronal de estos sectores a reconsiderar su postura y desarrollar la labor de negociación colectiva que les legitima, teniendo en cuenta que, además, resulta mucho más favorable tanto para empresa como trabajador alcanzar un acuerdo. Igualmente, agradece la labor de aquellos empresarios que, individualmente, están manifestando su voluntad de llegar a acuerdos y no dejar desprotegidos a estos trabajadores.

Por el momento, los trabajadores del Metal participaron ayer en una asamblea de delegados y posterior manifestación hasta la sede de la patronal para exigir la prórroga de su convenio. Allí, en la Plaza del Mercado, se concentraron a su vez los trabajadores de Comercio que, a partir de ahora, quedan en desamparo sin su convenio.